Salud Visual
07/03/2023
La pandemia del coronavirus y el continuo incremento de los aparatos tecnológicos ha conseguido cambiar los hábitos de vida y nuestras herramientas laborales y sociales. Una de ellas son los ordenadores, cuyo uso se ha visto especialmente incrementado.
Tanto el mundo laboral como el educativo tuvieron que adaptarse a la actividad online. La modalidad online o híbrida fue la solución para afrontar una pandemia mundial, pero actualmente, son muchas empresas las que siguen optando por esta modalidad de trabajo por razones medioambientales o económicas, entre otras.
A causa del sobreesfuerzo continuado que supone estar expuesto durante horas a una pantalla surge la fatiga visual. Esta afección se produce cuando nuestra vista se cansa y puede resultar muy incómodo. Alguno de sus síntomas son el dolor e irritación ocular que va a dificultar realizar otras tareas cotidianas.
Una de las alternativas para paliar la fatiga visual es utilizar unas gafas apropiadas a la “rutina digital” de cada uno. En algunos casos esta dolencia puede ser un síntoma de una enfermedad visual que necesita un diagnóstico y tratamiento específico.
Aun así, la fatiga visual no es sólo digital. Una persona puede experimentar esta afección por pasar largas horas conduciendo o leyendo un libro, por ejemplo. Cualquier sobrexposición de nuestra vista hacía una actividad puede traer consecuencias como el cansancio visual.
La fatiga visual no es una enfermedad ni suele ser grave y se va cuando descansas la vista o eres cauteloso con el uso intenso de ciertas actividades. La afección puede resultar más grave si las medidas de precaución y descanso no alivian la fatiga.
Se deben utilizar gafas graduadas o lentes de contacto adecuadas para mirar las pantallas.
Existen gafas de ver y lentes de contacto diseñadas especialmente para esas exposiciones largas de tiempo frente a pantallas. La graduación de las mismas no es obligatoria, se adecuan según las necesidades visuales de cada uno.
De este modo, las personas que padecen miopía o astigmatismo deben emplear gafas de ver o lentillas graduadas y los que no tienen ningún problema de vista, pueden utilizar unas sin graduación pero que protegen igual nuestros ojos de las pantallas digitales
Las llamadas gafas de ordenador se diferencian por el filtro azul que llevan en sus cristales, que ayudan a proteger tu vista frente a luces LED. Si trabajas con ordenador, tablet, o pasas muchas horas al día frente a una pantalla de un dispositivo eléctrico estas gafas te mantendrán protegido.
El síndrome visual informático se desarrolla cuando no se previene la fatiga visual, entre otros motivos. Su principal causante son las nuevas tecnologías y el exceso de tiempo que pasamos delante de una pantalla.
No tomar una distancia prudencial de las pantallas de los dispositivos, pasar más de dos horas viendo la pantalla sin parar o hacer sobreesfuerzos para ver mejor son causas que van a desarrollar el síndrome visual informático.
Este síndrome afecta a más de un 80% de la población que trabaja con dispositivos electrónicos o se pasa más de tres horas enganchado a una pantalla. Uno de los consejos para evitarlo está relacionado con las pantallas.
Aunque, como hemos mencionado más arriba, lo ideal es no pasar más de 3 horas seguidas mirando hacía una pantalla, por razones labores muchas veces es inevitable. Ajustar el contraste y la resolución de la pantalla va a disminuir la sobreexposición. Que la iluminación del ambiente no refleje en el dispositivo electrónico también es relevante.
Lo más importante es, ante cualquier síntoma, acudir a un especialista óptico. En Central Óptica te realizamos un chequeo y asesoramos la mejor solución para no dañar tu vista.